En Algún Lugar Sobre el Arco Iris

Cuando era pequeña, siempre miraba al cielo como mi interpretación literal del Cielo. Los días en los que el sol brillaba justo a través de las nubes y los rayos se reflejaban hacia abajo, lo veía como si Dios brillara sobre nosotros. Cuando los seres queridos fallecían, dirigía mis mensajes al cielo. Era como si vivieran en esas nubes del Cielo, fuera de nuestra vista. A medida que he ido envejeciendo, mi definición del Cielo ha cambiado obviamente, pero todavía hay una parte de mí que siente a Dios un poco más en esos días cuando los rayos del sol brillan hacia abajo.

Mientras estaba de vacaciones con mi familia hace unas semanas, viví un momento que realmente confirmo este sentimiento. Mientras estaba en la playa, mi hijo me señaló un arco iris que había visto. Miré hacia arriba y vi un arco iris mágico, diferente a todo lo que había visto antes. No había llovido y no había ningún arco, sólo este hermoso prisma de color que se asomaba entre las nubes. Me pareció surrealista. En ese momento supe que Dios estaba allí, recordándome a mí y a todos los que estaban en esa playa dispuestos a escuchar, que no estábamos solos y que Él siempre estaba con nosotros. Fue un momento tan especial para compartir con mi familia en un lugar que siempre ocupará llevare en mi corazón.

Mi familia ha ido a la playa de Wildwood Crest, Nueva Jersey, de vacaciones desde antes de que yo naciera. Todavía nos quedamos en el mismo lugar que antes era un motel, ahora un conjunto de condominios. Hace años, vino toda la familia extendida de mi padre -tías, tíos, primos, abuelos, lo que sea-, toda la banda italiana estaba allí. Alquilamos toda la primera planta del motel y nos lo pasamos como nunca. Esos son algunos de mis mejores recuerdos de la infancia. Ahora, después de muchos años, tengo mis propios hijos. La tradición se ha desvanecido y mis padres son los únicos que siguen yendo esta misma semana en este mismo lugar, pero ahora mi familia puede ir con ellos. No hay palabras para describir la sensación que siento en mi corazón al ver a mis propios hijos jugar y disfrutar de las mismas cosas que yo disfrutaba en ese mismo lugar cuando era niña: el tejo en el patio, saltar de la piscina para bebés a la piscina normal y viceversa, el largo paseo de ida y vuelta a la playa y los juegos en el malecón. No debería sorprenderme que en esos momentos de pura alegría y reflexión constante apareciera una indicación de Dios. 

La Biblia nos dice que el arco iris simboliza la alianza entre Dios y el hombre: que Dios nos protegerá. Al compartir estos momentos especiales con mis hijos, sólo puedo esperar que sea capaz de protegerlos del daño y de las duras realidades del mundo a medida que crecen. Este arco iris me ha recordado que, aunque no pueda protegerlos, cosa que como madre muchas veces no puedo, Dios los guarda. El Salmo 121:8 dice: "El Señor te cuidará en el hogar y en el camino, desde ahora y para siempre." Aunque ahora sé que Dios no está ahí arriba, por encima de esas nubes, son ocurrencias como este arco iris o los rayos de sol visibles los que me recuerdan que Él sigue ahí, siempre vigilando, siempre protegiendo.

ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Lisa Replogle ha tenido un viaje largo y cambiante en su relación con Cristo, y está emocionada de compartir lo que ha aprendido en el camino. Es maestra certificada de educación especial y de la primera infancia y actualmente enseña apoyo al aprendizaje en la escuela secundaria. Pasa su tiempo fuera del salón de clases entrenando Deportes Unificados de Olimpiadas Especiales y compartiendo su pasión por la danza con grupos locales para personas que se identifican como discapacitadas. Lisa y su esposo, Russ, son padres de gemelos idénticos de siete años a quienes les encanta estar activos y al aire libre.

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Maritza Zavala Smith nació en Guanajuato, México, y se trasladó a los Estados Unidos cuando tenía siete años.Estudió Salud Pública en Penn State, donde conoció a su esposo. Llevan 8 años casados y tienen dos niños gemelos y una bebe. A Maritza le encanta viajar y bailar salsa. Cuando no está deleitándose con el té verde matcha con leche y estando al aire libre con sus seres queridos, puedes encontrarla aventurándose con su tribu a través de los libros.